Mi trabajo en la construcción es algo que disfruto. No me gusta mucho la rutina, es algo que me enferma, no podría estar por ejemplo toda mi vida trabajando en el mismo lugar, viendo las mismas caras y haciendo la misma faena día tras día, y tras día y así hasta el infinito. Además mi profesión es muy bonita y en ella jamás se deja de aprender, hasta el tipo mas nuevo en el trabajo puede darte ideas sobre como hacer mas fácil una determinada tarea.
Pero no todo es bueno en este sector. Desgraciadamente en la construcción para empezar a trabajar no hace falta mucha cosa, solo ganas de trabajar ( a veces ni eso ). Esto bueno, tiene sus pros y sus contras, pero este post va de las contras. Al ser de fácil acceso, hace que entren en la industria todo tipo de personas, como diría mi abuela, cada uno de su "pare y de su mare". Para que os vayáis haciendo una idea de que va toda esta paranoia que está escribiendo el Andaluz, os voy a hablar de los amigos de lo ajeno, de aquellos que tienen la mala costumbre de cambiar de lugar todo aquello que les gusta y no es suyo.
A ver, los robos en las obras, sobre todo en las grandes, están a la orden del día por desgracia, como dije, al ser una industria de fácil acceso, encuentras todo tipo de gente. En España por ejemplo me robaron las herramientas tres o cuatro veces y algo curioso, en Fuerteventura, donde trabajé dos años, a alguno de la obra se ve que le gustó mi desayuno y me lo robó durante tres días seguidos...cosa de locos si. En Canadá estaba mas complicado eso de los robos, pues todo estaba bajo candado, herramientas, ropa, comida... nada quedaba fuera, eso si, tu andabas con un llavero con mas llaves que donde las fabrican, pero ta, al menos todo estaba seguro.
En Uruguay nunca tuve problemas de este tipo... hasta ahora. En esta obra que estoy, de unos meses atrás se vienen sucediendo una serie de robos en la obra, a los compañeros les robaban practicamente cualquier cosa, todo servía, incluso la gasolina de la moto, vamos que se la sacaban del depósito. Celulares, ropa... en fin, que se nos coló una buena o buenas fichas. Precisamente una de esas fichas fue cazada hace unos días y comprobé como se trata a esta clase de artistas que se dedican a robar a sus propios compañeros, compañeros con los que trabajas y pasas nueve horas diarias.
Resulta que un compa notó que le faltaban los championes a la hora del almuerzo, este lo comunicó de inmediato a los delegados sindicales que corrieron la voz. El que limpia el vestuario, dijo que uno de los trabajadores había entrado hacía poco y le había observado un comportamiento extraño mientras guardaba y acomodaba algo en su mochila. Total, que cerraron el lugar y miraron en la susodicha del susodicho para confirmar sospechas. Una vez confirmadas, fueron en busca del artista que estaba tranquilamente tomando mate en la puerta de la obra como si nada. Lo llevaron para el vestuario, ya con las 120 personas que trabajamos ahí todos agolpados ( mas de uno quería matarlo, por eso estaba "escoltado" por los delegados ) y hablaron con el.
El asunto era obligarlo a renunciar a su puesto de trabajo, el colega dijo que lo haría sin problemas pero antes se iba a dar una ducha para irse limpito en el ómnibus... vamos, cero problemas.
Lo preocupante de la historia bajo mi punto de vista, es que el tipo no mostró en ningún momento signo alguno de verguenza o arrepentimiento. Como dirían por acá, estaba retranquilo, solo tenéis que imaginar la escena, salir del vestuario y atravesar un pasillo formado por los 120 compañeros gritándote de todo... y nada bueno, ningún cumplido. ¿En que nos estamos transformando? Encima tuvo suerte el muy... pues el compañero al que robó no lo fue a denunciar, eso si, ya está señalado no solo por nosostros, si no por la empresa.
Como está el mundo Andaluz... si te dijera que aquí ya roban hasta las tapas de las alcantarillas (http://ow.ly/arjuI), no te digo más, pero supongo que aquí la crisis es lo que tiene que se roba hasta los bordillos de las aceras si se dejan.
ResponderEliminarAllí supongo que aún no llegan a tanto, pero ya se sabe, ladrones ha habido, hay y habrá siempre, da igual en que parte del mundo te encuentres.
Un fuerte abrazo compadre desde "Españistan", saludos a la familia!
Víctor V. Valera
http://elcontentcurator.com
Hola Victor que tal?? Paaa, las tapas de alcantarilla jajaja, increible. Aunque vamos, el rastrillaje es algo que siempre ha habido, imagino que ahora con la crisis le darán mas color no se. Imaginate que en Sevilla dejar un paquete de tabaco a la vista dentro del auto siempre ha sido con el riesgo de llegar y encontrarte la luna rota... solo por unos cigarros.
EliminarUn abrazo tio y da saludos a Raquel!!
Y encima le dejan que se dé una ducha jajajaja, qué se vaya sucio en el omnibus ;)
ResponderEliminarJuan
Eso mismo pensé yo Juan... que se joda y se vaya sucio jajajaja
Eliminareso es lo malo de las grandes obras hermano, en las chicas los molemos a palos y despues a veces llamamos a "la cana" (policia) y le levantamos una denuncia cosa que sucede muy pocas veces depende de la victima y lo de los robos es algo diario y normal creo, pero es culpa nuestra por no cobijar bien las cosas aunque lo normal sería tener confianza en todos,y para que veas lo normal solo debes ir a una feria y verás muchos puestos con herramientas usadas, abrazos gallego
ResponderEliminarCompa!! que tal todo?? Te llegan las noticias de Conchillas? Por lo que me cuentan te roban hasta el aire, un cuidado bárbaro hay que tener con las cosas.
EliminarA este no lo mataron de asco, también hay que tener en cuenta que los delegados se lo montaron muy bien y controlaban la situación en todo momento.
Un abrazo Richard!!!
Tu relato me trae a la memoria una pintada con grandes letras rojas que, allá por 1979, leí en la caseta de obras de una promoción de apartamentos en Salobreña " ¡AY LADRON COMO TE PILLE!. Digo yo que mejor no pillaran al ladrón porque el granaíno que guardaba la obra era más bruto que un arado. Ahora he comprobado que suelen traer containers para guardar las herramientas o las izan con la grúa cuando acaban la jornada. Lo peor del caso que cuentas es que duele muchísimo que sea un compañero el chorizo, alguien por quien eres capaz de jugarte tu vida si ves la suya en peligro y con quien compartirías lo que tienes si vieses que lo necesita.
ResponderEliminarUn abrazo
Así es paisano. Compartes muchas horas con los compañeros del trabajo, tenemos que estar cuidandonos en la obra mutuamente, comemos juntos, no se y pensar que esa misma persona te va a robar algo sabiendo el trabajito que nos cuesta ganarlo...
EliminarLo que dices de las obras alla es cierto. Normalmente las metemos en la cuba de hormigón ( tacho ) y la grua se la lleva pal cielo, donde nadie las toca
Un abrazo paisano!!
El cinismo parece ser que es el pan que alimenta últimamente a muchos rateros. Ya platicaré a su debido tiempo una historia que nosotros vivimos al llegar a Uruguay; a grandes rasgo, nos robaron a través de un fraude hasta la risa y el tipo (el ratero por supuesto) viéndose prácticamente frente a la cárcel siguió retranquilo... ahora sí que pidió permiso para ducharse y tá!
ResponderEliminarBien dices, ¿en qué nos estamos transformando?
A mi la frialdad y la poquisima verguenza que mostró me dejo frio. No se, yo lo miraba y pensaba, son 120 personas gritándole de todo... No le da nada en el cuerpo? Increible.
ResponderEliminarPero vamos, esta gente se señala sola, Uruguay y Montevideo es muy chico, al final todos nos acabamos encontrando en otro trabajo. Se mató solo
Los robos en las obras de construcción son más comunes que el cemento y el acero. Realmente que pena, pero es así. Y tal como lo dices, sin verguenza alguna.
ResponderEliminarEn Venezuela es muy común que se roben los materiales de construcción los mismo trabajadores para ir armando sus propios ranchos, así que no solo los trabajadores sino también los materiales tienen que cuidarse como oro! Al final de la obra, se ha construido un edificio y 50 ranchos.
(Ranchos es el termino utilizado en Venezuela para definir a las viviendas autoconstruidas en zonas de riesgo).
Saludos, Andaluz!
Y cuidado con tu desayuno que siempre hay alguno que queda con hambre!
Ley, acá en Uruguay rancho tiene el mismo significado... aunque ya está tan arraigado que le llaman rancho a cualquier casa.
EliminarLo que cuentas de Venezuela es interesante, por lo que veo, en este país sería imposible, pues de vez en cuando hacen registros, no puedes sacar una tabla de la obra sin pedir permiso.
Saludos Ley, acá no hay desayunos, solo almuerzos y aunque es opcional, normalmente se come de una olla comun, por lo que eso es mas improbable jajajaja
Sé que llego tarde al post, pero solo quería decir que si yo me viera en un vestuario con 120 tíos gritándome y viéndome mal, lo último que se me ocurriría es ducharme :D
ResponderEliminarUn saludo!
Nunca es tarde si la dicha es buena Felipe, y gracias por pasarte por mi pequeño Uruguay. A mi no me hubiera dado la cara desde luego... ta, la verdad ni se me hubiera ocurrido robarle los zapatos a nadie, menos a un trabajador sabiendo lo que cuesta acá comprar las cosas.
EliminarUn saludo!!!